De acuerdo a los distintos enfoques por los que atraviesa nuestra cultura, es imprescindible destacar que la misma se encuentra basada en una serie de raíces no autóctonas, ya que como es de bien saber, Venezuela es un país totalmente mestizado, es decir, gracias a la llegada de los españoles a las costa venezolanas, este se convirtió en un territorio puente de llegada de muchas nacionalidades, siendo la inicial la española, seguida por portugueses, y así sucesivamente, lo que ha repercutido en que Venezuela adoptara una serie de culturas y costumbres diversas. Es a partir de alli que el arte popular comprende todas las manifestaciones creadoras de un pueblo, atendiendo a su sentir y sus necesidades sociales, económicas y hasta políticas. Es por ello que, el arte popular en Venezuela ha sido influenciado por diversas culturas, como se expresa en líneas anteriores, encontrándose entre ellas la cultura autóctona de los aborígenes; la cultura africana, que trajeron los negros esclavos y la española, aportada por los conquistadores y las propias del mestizaje local, con todas ellas se conformó la cultura venezolana o el folclore venezolano. Las expresiones culturales venezolanas son el resultado de un largo y rico proceso de mestizaje. En tal sentido, cabe destacar que desde el primer contacto entre los conquistadores y los habitantes originarios de Venezuela, las diferentes culturas se mezclaron para conformar un gran abanico de tradiciones nacionales, donde los venezolanos han mostrado poseer muchas costumbres que le diferencian de otras naciones, por ejemplo: en la música llanera, la gaita, el joropo, el tamunangue, el tambor, el merengue, la polca, el fandanguillo, el joropo jorconiáo, entre otras; así mismo encontramos en la gastronomía una característica muy peculiar, comprendida por las arepas, el pabellón criollo (caraota, carne y arroz), las cachapas, y las hallacas en navidad; asimismo en el vestuario, siendo el tradicional el liqui – liqui y la alpargata. También se puede mencionar la forma peculiar de hablar de los venezolanos, que son característica de las regiones los distintos dialectos o formas, dependiendo de la región del país en la que se encuentren, por ejemplo; los maracuchos en el Zulia, los gochos o andinos, los margariteños y los llaneros, que tienen un acento singular, lo cual es muy característico de la región a la que pertenecen. Dentro de estas formas, también conseguimos los diferentes refranes como: De tal palo, tal astilla, Después de la tempestad viene la calma, Sacarle el jugo, Quien a buen árbol se arrima, buena sombra lo cobija, No hay mal que por bien no venga; y así una serie innumerable de refranes por mencionar. En este mismo aspecto nos encontramos con los famosos Mitos y leyendas, como por ejemplo “La leyenda del silbón”, juegos tradicionales como el famoso gurrufío, metras, papagayo, perinola, trompo, yo – yo, otros. En cuanto a instrumentos musicales se pueden mencionar el cuatro, maracas, arpa criolla, infaltables en la ejecución del joropo llanero y otros géneros musicales. Pero es que hasta en las expresiones naturales del venezolano se pueden mencionar las siguientes: Nagüará. Sube pa’ ‘rriba, Baja pa’ ‘bajo, Métete ‘dentro, Sal pa’ ‘fuera, entre otras. Pero en materia musical, cabe señalar que esta es una de las expresiones culturales más variadas y con orígenes más diversos; su evolución no se ha detenido nunca, en Venezuela la música es motivo de alegría y diversión, entre sus géneros más importantes se destacan: El joropo, como el primer registro de su existencia que data de 1749 y originalmente era llamado por el campesinado venezolano fandango, por lo que estaba posiblemente emparentado con el fandango español. Este se encuentra dentro de una música festiva que se ejecuta principalmente con arpa, cuatro y maracas. Su danza, caracterizada por pasos y figuras muy distintivas, es motivo de fiesta y constituye un baile alegre que invita a la participación popular. El joropo es ícono de la cultura venezolana. Seguidamente nos encontramos con la gaita, la cual es expresión de un conjunto de formas musicales, pertenecientes a diversas regiones, que se diferencian entre sí por la interpretación y los instrumentos con que se ejecutan. Por ejemplo en el estado Trujillo la gaita se dedica a San Benito y se acompaña principalmente con tambores; mientras que en el oriente del país sus letras hacen alusión a chistes y temas sociales y se ejecuta con cuatro, guitarra y mandolina. Por su parte, la gaita zuliana es considerada la más representativa; es típica de la época navideña, se ejecuta con cuatro, furruco y tambor y sus letras hacen alusión, principalmente, a la Virgen de la Chinita y a situaciones políticas y sociales del país. Pero asimismo, en Venezuela se interpretan otros géneros musicales como los aguinaldos y villancicos, que forma parte propia de las festividades navideñas, como el caso de las parrandas y cantos religiosos. Según la región, se acompañan con diferentes instrumentos, como el cuatro, el furruco, el chineco, la charrasca y los tambores. Es costumbre en algunos pueblos que los músicos recorran las calles cantando aguinaldos, mientras reciben obsequios y dinero. Los tambores constituyen la tradición musical afro venezolana. Consisten en un tipo de música que se interpreta sólo con tambores y es propia de las fiestas de San Juan en las regiones costeras del país. Aunque están asociados a celebraciones rituales, hoy en día suenan en cualquier fecha. Pueden interpretarse con más de seis tipos de tambores que producen sonidos diferentes. En el baile el hombre galantea a la mujer mientras esta dirige los movimientos, asimismo, el merengue venezolano, baile que adquirió popularidad en Venezuela a partir de 1920, aunque el primer registro de merengue venezolano data del siglo XIX. Los instrumentos de orquesta para ejecutarlo son la trompeta, el trombón, el saxo y el clarinete; y los acompañantes son el cuatro, el bajo y la percusión. Se baila de diferentes maneras según la región. El más conocido es el merengue caraqueño o cañonero. Las fiestas y danzas, como emblemática se encuentra la de San Benito. Pero hay que hacer énfasis en que fueron los españoles los trajeron junto con los demás Santos Católicos, por lo que San Benito se convirtió en el patrón de los negros, ya que éste fue negro como ellos. Ejemplo de dichas mezclas o sincretismos culturales son, digamos, la organización y los responsables de las ceremonias y de las sociedades de San Benito donde se asignan cargos de Mayordomo, Primer Capitán, Capitán de Plaza, Capitán de Brigada y Mandadores. El tambor, la maraca, la pólvora, alegran las Danzas, las marchas y los Cantos y lo mismo hacen el color y los adornos de los uniformes un ejemplo de esa presencia de la cultura africana en las ceremonias y fiesta de San Benito es la banda de tambores, el llamado chimbanquele o chimbangle que se oye en Bobures, Estado Zulia. Otra manifestación cultural es El Sebucán el cual es una Diversión Pascual originaria de los indígenas que poblaban la zona Guayanesa. Después de la Conquista, recibió aportes españoles en la forma del baile, y aportes africanos, en ritmo de la música. Del Oriente del país se extendió a casi todas las demás regiones, que comprende los estados Nueva Esparta, Sucre, Monagas, Anzoátegui. La denominación de Sebucán proviene del utensilio de mismo nombre que se usa para prensar y extraer el líquido venenoso de la yuca amarga en la preparación del casabe. Pero en este mismo aspecto, nos encontramos con la Parranda de San Pedro, la cual se originó con una fiesta de Negros en una hacienda de Guatire, donde crecía la caña dulce; allí vivió, tiempo atrás, la esclava María Ignacia. Su hija Rosa Ignacia un día enfermó, al extremo mal debilitada a la niña; entonces la madre pidió en milagro a San Pedro para que la muerte no se llevara a la enferma, por lo que a cambio bailaría y cantaría los 29 de Junio, curándose la hija de ésta por lo que la negra bailó y cantó con todos los esclavos de la plantación en honor al Santo milagroso. También encontramos a Los Diablos Danzantes de Yare, el cual se trata de una de las tradiciones autóctonas que se han mantenido a lo largo de los años. La alegría, originalidad y la sencillez espiritual del pueblo venezolano se reflejan en una de las más imaginativas y coloridas fiestas folclóricas del país. Es así como nos encontramos con una serie de manifestaciones culturales que a los largo de la historia se han venido estableciendo como icono cultural venezolano, y que desde sus inicios han sido un valor representativo del país en los espacios de la cultura mundial, ya que es para este país un punto de presentación, que a medida que se van ejecutando y llevando a otros ámbitos, se destaca la actividad cultural; todo ello sin mencionar otras áreas como lo son la música académica (o sinfónica), las artes plásticas, el teatro y la dramaturgia, la literatura, la escultura, la talla, artesanía, narrativa, entre otras. Es tan importante la manifestación cultural para el pueblo que, es por medio de ello que se destacan y se abren las puertas del desarrollo social, económico, cultural, político, científico, tecnológico, y humano de un país.
OBRA: Manifestaciones culturales de Venezuela (Guía)
PUBLICACIÓN: Carlos J. Arteaga
Nirgua/marzo/2011